_ Aniversario 50 de la campaña de Alfabetización
Héctor Arturo Ni la lluvia ni el fuerte viento pudieron impedir que aquel viernes 22 de diciembre de 1961, junto a la estatua del Maestro, ondeara junto a la Enseña Nacional, la Bandera de Territorio Libre de Analfabetismo. La joven Alba Margarita Cortina Aguirre, quien había cumplido en junio 17 primaveras, con su uniforme de las Brigadas Conrado Benítez, fue la encargada de tal honor. Pequeña de estatura, recibió la ayuda solidaria de varios militares, porque aquella bandera era enorme y Alba apenas podía con la driza para llevarla a lo más alto del mástil. Antes, había sorteado peligros y pantanos en la zona de la Ciénaga de Zapata, cerca del central Covadonga, donde alfabetizaba y compartía la vida campesina con una familia de cinco adultos. Desde allí salió para encontrarse con su padre, miliciano del Batallón 117, combatiente contra los mercenarios que en abril de 1961, trataron, entre otros planes, de impedir a sangre y fuego que los cubanos fuéramos todos más cultos, para que siguiéramos siendo menos libres. Ayudó a curar heridos y en las labores de la cocina, hasta que retornó a su misión de alfabetizadora, a la cual se sumaron su madre y hermanos, incluido el más pequeño, de solo 11 años de edad. De aquellas jornadas inolvidables ha transcurrido medio siglo y Alba continúa firme en sus convicciones, como el primer día, orgullosa de lo que ha hecho. GRANMA
0 Comments
Your comment will be posted after it is approved.
Leave a Reply. |
Archives
April 2016
|